Introduccion a las Pruebas Grafico - Proyectivas |
Las Pruebas Proyectivas se caracterizan por ofrecer al individuo, objeto de análisis, estímulos suficientemente ambiguos, con formas poco definidas y poco usuales para que, sobre ellos, pueda contarnos sus percepciones. En el caso de las pruebas específicamente gráficas, se solicitará al sujeto que dibuje y se entenderá la proyección como el mecanismo que permite colocar en un objeto externo - en este caso la hoja de papel - lo que ve, permitiendo al evaluador conocer sus características personales.
Las pruebas gráficas son amigables a la población en general, sin distinción de edad, formación académica, nivel sociocultural, etc. y pueden ser aplicadas en cualquier contexto psicológico donde sea necesario profundizar información respecto de la dinámica de personalidad. El examinado proyecta su mundo emocional, sus rasgos, la manera de enfrentar sus necesidades y tensiones, su actuación social, su dinamismo y productividad, su estilo de pensamiento y de comportamiento, su forma general de responder y actuar en la vida.
Los dibujos se consideran especialmente sensibles para revelar aspectos inconscientes y estructurales del comportamiento, permitiendo así al evaluador acceder a una dimensión de la personalidad mucho más profunda y, por lo tanto, contar con mayores elementos de juicio que le faciliten hacer una predicción del comportamiento a mediano y largo plazo.
Los psicólogos que trabajan en áreas donde los procesos de evaluación son necesarios, requieren ser eficientes en la utilización de las herramientas disponibles para así cumplir con la misión de comprender profunda y completamente la personalidad total del sujeto evaluado. Éste estudio de la personalidad debe abarcar aspectos pasados y presentes (diagnóstico), futuros (pronósticos) y, además, dejar claros los componentes adaptativos, los recursos, las potencialidades, las dificultades, etc., que permitan tomar las mejores y más convenientes decisiones. La experiencia de dibujar posibilita la construcción de un escenario mucho más cercano entre psicólogo-sujeto, menos estresante, más humanizado y, menos mecánico e impersonal cuando se realiza dentro del contexto laboral. Al participar en la formación que ofrecen estos Seminarios se obtienen entre otros los siguientes beneficios:
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